Personajes molones: Ronald McDonald

En Vas Tú Listo somos más zampabollos que comedores de  hamburguesas (a decir verdad las únicas que comemos son las que nos preparamos en casa de Kiko cuando frikeamos allí). Pero si algo tenemos claro es que las que nos zampamos son las que nos preparamos nosotros, porque si  hay algo que no toleramos en esta vida son las que vienen avaladas por Ronald McDonald. No se trata solamente por el hecho de que nuestra religión no nos permite comer perro, sino principalmente por la razón de que tenemos pruebas de que el Señor Ronald es un poco cabrón. Nuevamente pusimos a indagar a uno de nuestros reporteros para escribir un post sobre este personaje, y helados nos hemos quedado con las fotos que nos ha traído. Si alguna vez tuviste en buena estima a este menda, por favor no sigas leyendo.

Lobezno: El fin

Continuo estos días de vacatas releyendo cosillas de mi comicteca que tenía ya olvidadas, y hoy le ha tocado el turno a este cómic protagonizado por Lobezno, que fue publicado por la editorial Panini allá por el mes de mayo del 2005. No sé si recordáis que hace unos años empezaron a proliferar proyectos de este tipo, dedicados a mostrarnos «la ultima historia» de ciertos personajes del universo Marvel.  Como consecuencia de ello surgieron títulos tales como Punisher: el fin (Ennis/Corben), Hulk: ¿fin o principio? (Peter David/Dale Keown), los 4F: el fin (Alan Davis), y esta miniserie de seis números que  nos ocupa en la reseña de hoy titulada Lobezno: el fin, de la mano del guionista Paul Jenkins.

Lo primero que hay que decir de ella es que se trata de una historia en la que se nos narra un futuro no oficial fuera de la continuidad del personaje (es decir, algo parecido a lo que pudimos ver en la historia de El viejo Logan, en el sentido de que este bien podría ser uno de los posibles futuros que le esperan al personaje). ¿Y qué nos vamos a encontrar en este cómic que podría ser la última aventura del mítico Logan?. Pues enseguida os lo comento, muchachada.

Kin

Durante estos días de vacaciones estoy aprovechando a releer cosillas que tenía por ahí ya casi olvidadas y de las que ya sólo me quedaba un vago recuerdo de cuando lo leí en su día hace ya varios añazos (es lo bueno de este vicio, que puedes volver a degustar el material acumulado cuando quieras). Así que hoy después de comer me he puesto manos a la obra con este cómic de la editorial Top Cow titulado Kin, que fue publicado por estos lares de la mano de Planeta DeAgostini allá por el año 2001.

Realmente me ha agradado volver a sostener entre mis aterciopeladas manos unos cómics en grapa de cuando el papel tenía la suficiente consistencia para que no se quedara como el puto acordeón de María Jesús después de tocar su musicote de los pajaritos a bailar, (tal y como ocurre hoy día con la mierda de papel que pone la editorial Panini en los cómics de 24 páginas, que acabó finalmente por quitarme las ganas de hacerme con material en ese formato después de años comprando grapa). Por eso desde hace ya varios meses sólo compro tomos y reediciones gracias a Panini y a su forma ratonera de publicar.

La morsa de la semana: Ricky

Pues una vez más os traemos esta sección dominical en la que elegimos a la que será la morsa del blog durante los próximos siete días. Hoy os presentamos a la morsa Ricky, famosa por usar sus colmillos para abrirse las latas de foie-grass en la hora de la merienda y untárselas con la aleta en el pan bimbo de ese guarrindangas sin corteza. Ricky es la imagen publicitaria de una famosa agencia de turismo que recomienda a los turistas que vayan por aquellos lares que se lleven una rebequita o algo, porque allí suele refrescar mucho (sobre todo por las noches). ¡Ah…!, esperad un momento…, que me pasan una nota en la que me dicen que la sección es La Moza de la Semana y no La Morsa de la semana. Me informan también de que en un ratinín Kiko nos traerá el post correcto en el que la protagonista será una auténtica diva de los videojuegos que yummmm… Pues nada, perdonad, ¿eh?. Ha sido un pequeño fallo por el que os pedimos disculpas. Permaneced atentos a la sección correcta.

Monsters

Películas pufo y maluchas las he visto a montones, pero Monsters se lleva la palma (y no precisamente la de Oro del Festival de Cannes). Cuando este film se estrenó hace unos pocos meses lamenté el hecho de no haber ido a echarla un vistazo al cine, pues cuando vi el trailer en su día me dio muy buenas vibraciones, pues hacía presagiar un interesante film que apuntaba grandes maneras. Ciertamente parecía una película muy en la línea de Monstruoso con esas imágenes del trailer en las que se insinuaba un largometraje con criaturas la mar de extrañas y donde se suscitaba el interés del espectador dejándole con ganas de más por lo poco que se enseñaba de ellas.

Así que ayer en casa de Kiko nos dispusimos a ver este film emocionados y casi con lagrimones en los ojos esperando ver una peli chula de ciencia-ficción que nos hiciera vibrar más que el mando de la Xbox. Pues bien, a este respecto os diré que finalmente acabamos ambos medio mareados y pidiendo la hora por la penitencia a la que nos estábamos sometiendo con el visionado de este film.

Down

Ciertamente el 2007 debió de ser un año en el que debí de padecer alzheimer o algo muy por el estilo, pues últimamente revisando mi comicteca me estoy encontrando con tomos que entraron en mi casa por aquel entonces y a estas alturas estaban ahí muertos de risa y sin leer (tal y como comenté hace unos días al hablar de Obergeist Ragnarok). Este al que dedico hoy mi reseña fue publicado por Norma editorial allá por mayo de aquel mencionado año, así que 4 añazos después de su compra por fin lo he degustado (anda que…).

Sin duda alguna, lo que más llama la atención a primera vista es ver el nombre de Warren Ellis en la portada, pues bien es cierto que es el responsable de magníficos y geniales cómics tales como Authority, Transmetropolitan o Iron man: Extremis. Sé que con esto que voy a decir me expongo a mofa, afrenta y escarnio público, pero aprovecho la ocasión que se me brinda para cantar a los cuatro vientos que su aclamada Planetary me resultó un poco pufo (pero bueno, para gustos los colores, joe).

Reflexiones futboleras

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Muchos de vosotros cuando me véis por la calle me paráis y me decís: «Oye Rober, ¿cómo es que viviendo en Madrid te gusta que gane el Barça, pedazo de gili?». Yo suelo poner ojos de canica y argumento mi postura postulando que en esta vida hay dos tipos de personas: los Bilardistas y los Menottistas. Y como gran Menottista que me considero, soy ante todo un amante del buen fútbol y del espectáculo (por lo que me paso por el forro la concepción resultadista que trae implícita el Bilardismo de que lo importante son los 3 puntos aún jugando como zorras y haciendo un fútbol ratonero). Por este razonamiento he de decir que yo apoyo a quien mejor fútbol hace, y hoy por hoy (y desde hace mucho tiempo) admiro el juego que despliegan en Cam Barça, por lo cual me gusta que ganen. Creo que este fervor blaugrana me viene de la época en la que jugaban en ese equipo Figo y Rivaldo (la mejor pierna derecha y zurda respectivamente de los últimos años, que atesoraban un fútbol de la hostia con el que yo flipaba). Eso sí que era un espectáculo.

Personajes molones: Elmo

Muchos pensaréis que qué puede tener de molón un personaje que es una puta marioneta peluda con voz de pito y que sale en el Barrio Sésamo. Todos nuestros lectores son sabedores a estas alturas que en Vas Tú Listo nos gusta indagar en todos los recovecos y sacar todos los trapos sucios de cualquier cosa o persona que investigamos. Pues bien, con Elmo hemos de decir que nos hemos quedado totalmente picuetísimos, pues hemos descubierto que no es el personaje tan mojigato, seco y «alelao» que todos pensábamos. Nuesto equipo de reporteros ha tenido acceso a un documento que muestra que detrás de las cámaras este muñecajo tiene un desparpajo y unas tablas que verdaderamente son «pa echarle de comer aparte».

Lunes molones: Equilibrium

Ayer tuvo lugar nuevamente otro de nuestros lunes frikis con los que paralizamos el barrio de Kiko. Fue tremendo el cordón policial establecido para mantener a raya a las 20 añeras histéricas, al que daba colorido una bonita alfombra de terciopelo que se extendía entre la plaza de parking que nos habían reservado para el evento y la entrada al portal de Kiko. Así que tras bajarnos del coche empezamos a tirar besos al respetable mientras la muchedumbre nos lanzaba rosas, hecho ante el cual Kiko cogió una, se la puso entre los dientes y cruzó la alfombra dando palmas como un loco a lo Marujito Díaz). Como es de suponer, fueron muchas las jóvenes que rompieron a hacer pucheros varios (y es que por algo nos llaman el «dúo cebolla», porque hacemos llorar a las niñas).

Tras esta introducción gilipollesca os comentaré que ayer le tocaba elegir película al nunca bien ponderado Kiko, y cuando un servidor se barruntaba que esta semana este mozo tendría guardada en la manga alguna peli chunga de terror, sorprendió a propios y a extraños y se marcó una apuesta personal titulada Equilibrium.

Harry Brown

Cuando vi el título de este film así un poco de refilón y de pasada, pensé que se trataba de una película del dueño de Snoopy. Luego me puse los lupos y vi que el nombre no era Charlie, sino Harry y por fin ya pude respirar más tranquilo. Aprovechando que tenía visibilidad y tal me puse a analizar la portada del film y ciertamente uno no puede evitar pensar que esto tiene un aire a Gran Torino por los cuatro costados. Ciertamente este largometraje no llega al nivelazo de la peli de Clint Eastwood, pero se deja ver por el simple hecho de tener como protagonista a Michael Caine, ya que sin él resultaría la típica peli para visionar en la sobremesa de Antena3 reposando la comida en el buche.

Supongo que todos nos hemos quejado alguna vez cuando en nuestro barrio hemos visto a algún grupo de jovenzuelos veinteañeros haciendo botellón o dándole al jodío vicio de los porros. Pues bien, esta chavalería comparada con la del barrio donde vive nuestro protagonista son simples criajos de San Ildefonso de esos que cantan con voz de pito.