Hoy retomo esta sección para hablar de un personaje de comics no demasiado conocido, razón por la cual hago este pequeño croquis para el que nunca haya oído hablar sobre ella. A los fans de la literatura gótica sí que les resultará conocido el nombre de Anita Blake, una caza-vampiros con cierta mala leche, que aunque durante cierto tiempo su lema era: “Yo no salgo con vampiros. Yo los mato”, finalmente traicionará ese principio y se la podrá ver algún que otro idilio con esos seres de ultratumba, licántropos incluidos (¿no le recuerda a nadie esto una especie de mezcla entre Buffy y Crepúsculo?. Yo conocí a Anita Blake por un tomo que se publicó en nuestro país hace ya unos añitos, en el que este personaje literario de las novelas de Laurel K. Hamilton, fue adaptado al mundo del comic en este título dibujado por el genial Brett Booth. Las historias de terror-detectivesco de este personaje se desarrollan en un mundo donde vampiros, zombies y hombres-lobo han sido declarados ciudadanos de Estados Unidos, siendo Anita una de las más fieles colaboradoras de la policía en lo que a casos relacionados con personajes de esa calaña se refiere.