
Por eso me he decidido a dedicarlas un post en su honor, porque creo que se merecen un homenaje debido a ese «don» que caracteriza a estos especímenes.
Como usuario de transporte público, se puede hablar de una dicotomía en lo que a paradas de bus se refiere: las que la gente forma una cola y las que no. Es en este segundo escenario donde las Marujas se desenvuelven como si nada con su gracejo natural…; y es que da igual que llegues el primero a la parada y te pongas en una posición privilegiada para subir el primero al autobús: la Maruja usará su superpoder para ir ganando posiciones estratégicas poco a poco, de forma que cuando el autobús llega a la parada la ves ya situada delante tuya como si hubiera hecho uso de la técnica de la teleportación a lo Goku.
Así que el blog de Vas tú listo y todos sus componentes (o sea yo) nos quitamos el sombrero ante estos entrañables seres por ese superpoder, habilidad innata (o como queráis llamarlo) digna de alabanza.