Para fans de la serie negra

La de veces que habremos puesto los muchachos de Vas Tú Listo la pose a lo Escarlata O’Hara levantando una mano hacia el cielo y poniendo a Dios por testigo de que nunca más volveríamos a ver Tele5 (a no ser que vuelvan las Mama-Chicho). El caso es que este cómic titulado Scarlet no va sobre la protagonista de Lo que el viento se llevó. Sin duda alguna, lo que más nos ha llamado la atención de él ha sido esa dupleta creativa compuesta por el tándem Bendis/Maleev, que ya nos dejaron cosillas bastante majas, como por ejemplo su etapa en Daredevil o sus números de Spiderwoman. Este cómic titulado Scarlet es una de las novedades que publicará la editorial Panini para el mes de octubre, al que puede que muchos no lleguemos debido al riesgo que existe en estas fechas de morir «deshidrataos». Pero si en octubre sigo vivo, os puedo decir que un servidor dará una oportunidad a este tomo, porque al bueno de Bendis se le suelen dar bien este tipo de historias de género negro.

El caso es que por lo que he podido documentarme en la red, el argumento de Scarlet gira en torno a una joven de Portland cuya vida es destruida por culpa de la corrupción policial. Ello la llevará a embarcarse en una cruzada contra toda esa trama criminal que la rodea. Es la historia de una persona que no sabe de lo que es capaz hasta que se ve presionada por las circunstancias. La historia no tiene mala pinta, pero lo que sí que es la repolla es el pedazo de dibujo de Alex Maleev con ese estilo noir tan característico. ¡Alex Maleev beatificación ya!.

Así que yo no os digo nada, chavales…, salvo que esto tiene una pintita cojonuda y lo apadrino como una de mis apuestas personales. Puede que a Bendis le hayan caído muchas hostias últimamente, pero en lo que se refiere a este tipo de historias yo sigo teniendo en él una fe ciega. Pero vamos, que en octubre cuando me haga con él, me lo lea y haga la reseña, ya os contaré más detenidamente si tenía razón o si me he tenido que acordar de los muertos «pisoteaos» de cierto guionista. ¡Qué dios reparta suerte!.

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