Lunes Molones: Tiburón 3D – La presa

Muy iluso de mí pensé que para la última reunión friki del 2012 nuestro redactor Kiko tendría preparado un pedazo de film molón que nos hiciera olvidar todos los ratos de pelis mierderas que hemos padecido a lo largo de este año que se nos va (sí, que se nos va cual joven que sale pitando sin mirar atrás cuando su novia le dice que se ha quedado embarazada). Pero no amiguitos, resulta que unos minutos antes de que llegara el momento para ver nuestra peli del lunes coge el tío y me dice: «¡Venga siéntate ahí que te voy a poner la peli!». Y por supuesto una vez más me puso la primera puta mierda que pilló…

El caso es que así a priori el tiburón de la carátula me resultó «salaete», ya que me recordó nuestra época discotequera en la que íbamos detrás de las chavalas ahí con la boca abierta en plan posesos y ellas salían corriendo despavoridas poniendo un rictus similar al de la gachí de la foto. Así que con resignación y con cara de póker nos dispusimos a ver el movidote que este largometraje podía ofrecernos.

Lunes molones: Eden Lake

Nueva reunión friki de los muchachos de este blog y en la que por fin hemos visto la luz de que como jugadores del Fifa somos unos putos paquetes del copón y tenemos menos futuro que el ginecólogo de Bibi Andersen, no me jodas. Por ello hemos decidido renegar de él y darle a los shooters y demás juegos en los que haya que reventar cabezas a tiros o a base de hostias, que en eso tenemos más futuro que Pepe sacándose las «opos» para entrar en el partido nazi con honores.

Pero pasando ya a comentar la peli friki de hoy, diré que esta semana le tocaba elegir al nunca bien ponderado Kiko. El caso es que cuando llegué a su casa estaba ahí el tío desmayado, echando babas por la boca y en estado catatónico. Tras despertarle tocándole con un palo, el muchacho abrió un ojín y me dijo que su estado de shock se debía al peliculón que me tenía preparado para nuestra reunión friki de los lunes. El título del largometraje en cuestión era Eden Lake, y con arte y salero nos dispusimos a verla para comprobar si era tan buena como barruntaba este tío «flipao»…