Los Vengadores: Grandes amenazas

Cuando casque y lean en mi última voluntad que deseo ser momificado entre las páginas de mis cómics favoritos, se van a hinchar a envolverme entre páginas y páginas de tomos de la línea Marvel Gold de Panini. Y es que siempre es agradable contar todos los meses con una buena dosis de este tipo de lectura cual yonki que espera su dosis de metadona en la narcosala de su barrio. El caso es que hoy he tenido el placer de degustar este nuevo tomo que recopila material clásico del mejor grupo del mundo del noveno arte, y me ha dejado la misma cara de felicidad que la de Goku cuando iba montado en su nube Kinton.

Realmente siempre es un delicia el poder volver a recordar algunas de las míticas aventuras clásicas de Los Vengadores, y más si son las de plena época dorada del grupo. Y si están de por medio nombres como Jim Shooter, Marv Wolfman, Sal Buscema, George Pérez o John Byrne, ya no te digo «ná».  Vamos que si eres fan del grupo y no has leído este material no sé cómo puedes conciliar el sueño por las noches sin tener que usar cloroformo.