Hace unos días otro redactor de este blog y el que suscribe íbamos de camino hacia las Barranquillas para quejarnos de que uno de los yonquis de allí nos había pinchado el balón, cuando de pronto surgió el tema del nuevo título de uno de nuestros guionistas favoritos (Brian K. Vaughan). Y es que cualquier friki del noveno arte reconocerá a este tío por cosas como Ex Machina o Y: El Último Hombre. El caso es que ahora este buen mozo ha regresado para sorprendernos con «Saga», una serie regular en la cual tenemos puestas más esperanzas que en el hecho de poder arrancar de cuajo algún día el tanga de una playmate.
Muy pronto «Severed»
Joder, estoy hoy de una mala hostia que ni Pepe enterándose de que le han robado su insignia de las juventudes hitlerianas, no me jodas. Estaba yo ahí jugando al multijugador del Call of Duty tan tranquilo y sin meterme con nadie, cuando de pronto ha entrado en la partida el típico puto camper y se ha liado la manta a la cabeza a cargarse a «to» dios con el rifle francotirador de los cojones. Así que tras acordarme de sus putos muertos pisoteadísimos he rabiado, he apagado la Xbox y me he venido a escribir sobre cierta noticia comiquera que me tiene más nervioso que Krilin cuando se calzó a C-18.
El cómic de Max Payne 3
Aún recuerdo la vez en la que allá por el año 2001 (muchos de vosotros no habíais ni nacido) estaba yo por el FNAC mirando los videojuegos de PC y me topé con el titulado Max Payne. Como por aquel entonces era un «flipao» de mierda, fue ver las imágenes de la parte trasera de la carátula y empezar a ponerme a relinchar, tal y como hago cada vez que veo a una tía buena. El caso es que la primera parte de esta saga la jugué en PC, la segunda me la pasé en la Play2 y la tercera lo haré en mi flamante Xbox. Ya quedan muy pocos días para que salga esta última entrega, pero lo bueno es que no sólo podremos deleitarnos los ojines (los de la cara) con el videojuego de Max Payne 3, sino también con el cómic…
En mayo «Locke & Key: Corona de sombras»
Al leer el título de este post los más castizos pensarán que eso de Locke hace referencia a cierta famosa expresión que usan en los pueblos los paletuzos cuando no entienden algo y dicen aquello de: «¿Lo-qué?…». Sin embargo, los más «echaos pa alante» habrán reconocido ese título como el famoso cómic de la dupleta formada por Joe Hill y Gabriel Rodríguez, del que ya hemos hablado anteriormente en este post y en este otro. Así que os podéis imaginar que estemos más nerviosos que un zoofílico en el Faunia ante el hecho de que la editorial Panini ha anunciado que en el mes de mayo tendremos el tercer volumen de esta saga y llevará por título Locke & Key: Corona de sombras.
El pequeño libro de Los Beatles
Cualquier persona que nos siga de forma un poco asidua será sabedora del hecho de que yo personalmente soy arduo admirador de Elvis Presley y que siempre defenderé el hecho de que este tío ha sido el mayor artista del siglo pasado, con diferencia. En cambio, nuestra colaboradora Almu se pasa a Elvis por el forramen y su pasión por los Beatles es tal que hasta se ha hecho socia compromisaria del Villarreal con eso de que son el submarino amarillo. Sea como fuere, para que luego diga que soy un tío loco, un zampabollos y un viejo verde, hoy quiero hablar sobre una novedad comiquera que seguramente agradará a todos los fans de los Beatles hasta el punto de que muchos os empezaréis a restregar por las paredes cual tío cachondón bailando la lambada con una mulatona.
Firebreather: Los problemas crecen
Así leído en frío esto de «firebreather» uno puede pensar que hoy vamos a hablar del típico fumeta que se pimpla un par de cartones de tabaco al día. Por cierto, quiero aprovechar esta ocasión que se me brinda para dar el consejo de qué hacer cuando se os ponga a vuestro lado un tío que fume y os esté echando todo el puto humo de los cojones. Lo mejor para estos casos es ponerse a escupir gapazos muy seguidos cerca de él y cuando el menda os mire con cara de «Joder, deja de escupir», vosotros le miráis a él con cara de «Joder, pues deja tú de echarme el puto humo». Sirva esta introducción gilipollesca para hablar de cierta novedad comiquera que ha salido este mes de abril titulada Firebreather: Los problemas crecen.
Jennifer Blood
La verdad es que cualquier persona ajena al mundillo que vea un cómic con la palabra Jennifer en su título se pensará que esto va a tratar de la típica choni ensangrentada por haberse pegado de hostias con otra por conseguir los mimitos y arrumacos del «cani» de turno. Pero no amiguitos, Jennifer Blood es el nuevo cómic del guionista Garth Ennis, ese enfant terrible del mundo del noveno arte al que si das carta blanca para que guionice como le salga del ojete se sacará de la manga alguna de sus más que típicas barrabasadas a las que ya nos tiene acostumbrados a sus seguidores.
El caso es que como gran fan que me considero de otros cómics suyos tales como Predicador, Crossed o The Boys, no podía menos que degustar esta última paranoia salida de su mente. Y ni que decir tiene que tratándose de una historia de este insigne irlandés abundarán por doquier los momentazos repletos de gamberrismo sádico, hijoputismo, mala leche, humor negro y chabacanadas varias (vamos, lo que viene siendo habitual cuando uno sostiene en sus zarpas un tomo guionizado por este tío)…
Witchblade y Red Sonja juntas en un cómic
No sé si os hemos comentado alguna vez que a los muchachos de este blog nos mola eso de asar un pollo usando un mechero y un frasco de laca. El caso es que el otro día estaba yo ahí preparando esta magnífica receta cuando otro de los redactores del blog me preguntó si me había enterado ya de cierta buena nueva. Yo por un momento pensé que se refería al hecho de que los tangas que tiende nuestra vecina de enfrente son cada vez más minúsculos. Sin embargo no era esto a lo que se refería el muchacho, sino a cierto notición comiquero que me resultó curioso cuanto menos.
Diario de un profesor estresado
En Vas Tú Listo somos de los que defendemos la idea de que muchos jovenzuelos de hoy día están faltos de una buena hostia o de una buena Mili en Ceuta o Melilla. Y es que aficiones como destrozar papeleras, patear cubos de basura y cabinas de teléfono están bien si eres Pepe o un puto hooligan, pero no para los 15 añeros de hoy en día. Y es que es difícil torear con la chavalería actual sin que a uno le entren ganas de enganchar a uno de estos niñatos por la pechera, colgarlo del techo y jugar con él a Viva Piñata. Y quienes más sufren este estrés son los profesores de instituto, a quienes desde Vas Tú Listo les recomendamos este cómic con el que se sentirán tan identificados.
En abril «Calígula»
Muchos de vosotros a veces nos paráis por la calle y tras increparnos sobre el hecho de cómo con semejantes putos caretos tenemos los santos cojones de dejamos ver a la luz del día, a continuación nos decís cosas como esta: «¡Sí bueno, vuestro blog está bien y tal, pero sólo comentáis novedades comiqueras de la editorial Panini y de Planeta DeAgostini, cacho de cabrones!» (y acto seguido nos escupís a la cara). El caso es que el otro día estuvimos debatiendo sobre ello y por eso hoy queremos comentar cierta novedad de la editorial Glenat (que por cierto, ahora han cambiado el nombre a EDT), la cual nos tiene más nerviosos que Rajoy mirando a dos lesbianas haciendo la tijera.








