Análisis: Battlefield 3

Si hay una saga de videojuegos que provoca que los muchachos de este blog nos tiremos horas y horas jugando a ellos como criajos coreanos al borde de la epilepsia, esos son los «Battlefields». El nunca bien ponderado Kiko ha tenido muchas buenas ideas a lo largo de su vida (como la de untar el bacon con mantequilla), pero ninguna es comparable a la que tuvo hace unos meses cuando me propuso que nos pilláramos el Battlefield Bad Company 2. Y es que quizás este haya sido el juego con el que más horas nos hemos tirado viciándonos online junto con otro colega nuestro que también es fan de la saga.

Así que en cuanto nos enteramos de que iba a salir la tercera entrega de Battlefield es normal que nos pusiéramos más nerviosos que el monitor de natación de los Gremlins. Por fin hemos tenido el placer de catarlo y os podemos decir que desde que lo tenemos nuestra vida social ha acabado por completo y son muchas las personas que nos han dado por muertos por el hecho de llevar días sin vernos. Veamos porqué este juego se ha convertido en uno de nuestros preferidos.

Modo Campaña

Ciertamente Battlefield siempre ha vivido un poco a la sombra de Call of Duty, pues son muchos los que opinan que el juego de Activision es el rey de los shooters por excelencia. Sin embargo, en esta nueva entrega los chicos de DICE se han esforzado por hacer un modo campaña que no tenga nada que envidiarle. Nos pondremos en el pellejo de un soldado llamado Henry Blackburn, a quien en los primeros compases del juego veremos pasándolas canutas en una sala de interrogatorio de la CIA. Por medio del recurso del flashback iremos reconstruyendo la historia de todo lo ocurrido, a través de una serie de fases o misiones en las que poco a poco se irá esclareciendo todo el meollo de este modo campaña. Sin entrar mucho en la trama para no desvelar nada, básicamente gira en torno a una organización terrorista muy chunga llamada PLR, la cual tiene en Faruk Al-Bashir su cabeza pensante, todo ello aderezado por la amenaza de ciertas armas nucleares. Todo esto sirve para meternos de lleno en este shooter en 1ª persona repleto de tiroteos chulísimos y muy intensos a través de distintos escenarios, (aunque yo personalmente me quedo con los que tiene lugar en Irak).

Soldado cegato buscando las lentillas

Como elementos destacables de esta nueva entrega merece la pena reseñar que se mantienen los mismos controles de los Battlefields anteriores, lo cual es de agradecer por parte de los fans de la saga que estamos ya acostumbrados a ellos. Por cierto, por fin se ha introducido la posibilidad de poder tumbarse y desplazarnos por el suelo cual gusanazos (algo que yo personalmente siempre he echado en falta en esta saga), pues a veces sólo con agacharse no era suficiente para evitar que las balas te alcanzaran en la cocorota, incluso estando detrás de una cobertura. Otra novedad interesante es la inclusión de escenas de vídeo interactivas en las que deberemos pulsar ciertos botones en el momento indicado si no queremos cascar, lo cual provoca que el jugador no baje la guardia en ningún momento y tenga que estar atento a esas escenas que pueden salir repentinamente. Por supuesto estarán muy presentes también los niveles en los que nos pondremos a los mandos de algún vehículo, que como viene siendo habitual en Battlefield serán de lo más variopinto (tanques, cazas, helicópteros étc…), y que contribuyen a dar más variedad a las misiones del juego.

Así nos sacan a nosotros de la disco todos los viernes noche

Sin embargo, como nota negativa que se le puede achacar a este modo campaña es su excesiva linealidad, pero sin duda alguna esto es algo que se puede echar en cara a casi cualquier shooter bélico de hoy día. Y es que los muchachos de este blog echamos en falta un poco más de libertad a la hora de movernos y que la historia no se limite a seguir a un compañero todo el rato y buscar cobertura en los momentos de tiroteos. Tampoco pedimos una libertad de acción tipo sandbox, pero sí algo más de movilidad a nuestras anchas por medio del escenario. Hemos echado de menos también la opción de un modo cooperativo en la campaña, algo que debería estár más arraigado en este tipo de juegos. A pesar de todo, hemos disfrutado bastante con este modo campaña, aderezado con unos buenos gráficos, un magnífico doblaje y una inteligencia artificial de nuestros enemigos bastante pasable (de todas formas os aconsejamos que lo juguéis en un modo elevado de dificultad para que lo disfrutéis durante más tiempo).

Modo cooperativo

Como hemos dicho hace unos instantes, Battlefield 3 no cuenta con la opción de un modo campaña que nos permita pasárnoslo con un colega. Pero al menos en esta nueva entrega tendremos una modalidad que nos permite jugar una serie de niveles aislados entre dos jugadores. Se trata de una serie de misiones cooperativas (seis concretamente) con una duración estimada para cada una de ellas que varía entre los 20 y los 45 minutos, dependiendo de lo viciados de mierda que seamos. Aparte de los típicos niveles de disparar como locos a todo lo que se mueva, habrá otros con grandes momentazos en los que tengamos que hacer uso de algún vehículo, de forma que mientras uno conduce el otro ha de ir disparando. Sin duda alguna, se trata de una modalidad que nos ha encantado como grandes fans de todo lo que sea cooperativo online, y que esperamos que sirva de base para un futuro Battlefield con ese mismo cooperativo online en su modo de juego principal.

Asaltaremos viviendas de protección oficial

Modo multijugador

Verdaderamente este es el plato fuerte que buscan casi todas las personas que se hacen con algún juego de esta saga, y que en esta nueva entrega es todo mucho más espectacular que en Battlefield Bad Company 2 (y por tanto más divertido aún si cabe). Eso sí, esta diversión fue eclipsada los primeros días en los que el juego vio la luz a raíz de los problemas iniciales que hubo con los servidores, pues costaba dios y ayuda poder unirse a una partida. Pero menos mal que aquello fue un mal trago circusntancial que parece que ya ha quedado solventado. Pasando ya a comentar las modalidades del multijugador, hay que decir que contaremos una vez más con las ya vistas en la entrega anterior de Conquista (consistente en capturar y controlar diversas banderas repartidas por el escenario), y Asalto (en la que un equipo ha de tomar una serie de objetivos y el otro defenderlo). Tampoco faltará el Duelo por Equipos consistente en acabar con todos los enemigos de las patrullas rivales.

¡Aibá qué chorrazo!

Sin duda alguna, el multijugador de Battlefield en cualquiera de estas versiones se caracteriza por el hecho de que para salir victorioso en una partida es conveniente saber coordinarse con los miembros del grupo por el bien común, por lo que hace de él un videojuego ideal para viciarse varios colegas comunicados a través del auricular de la consola (jugado en esas condiciones es como realmente se disfruta Battlefield). Y más teniendo en cuenta la posibilidad de poder escoger entre 4 tipos de soldados (Asalto, Ingeniero, Apoyo y Reconocimiento), cada uno con sus propias habilidades y armas, las cuales podemos ir mejorando y desarrollando a medida que vayamos sumando puntos al final de cada partida. Y es que el uso de un arma en concreto permite sacar nuevas mejoras para ella, pero en el momento que nos dé por usar otra arma distinta esas mejoras desaparecen, lo cual es un elemento inquietante para que un jugador no se encasille siempre en el uso de una misma ametralladora y se interese por desbloquear las mejoras para otro arma de su arsenal.

Modo otoño-invierno de Battlefield 3

Además todo ello está aderezado por el motor gráfico del juego, Frostbite 2, que aparte de mostrarnos acción a raudales por todos lados de la pantalla, contentará a todos aquellos jugones que disfruten arrasando el escenario a lo Arteche y provocando destrucción por doquier. Y es que casi todo lo que encontremos a nuestro alrededor será susceptible de reventarlo a lo bestia, causando un caos muy serio en las partidas. Por cierto, no queremos acabar este apartado sin hacer una última puntualización referente al Online Pass, que como sabéis se trata de un código único específico para cada título, que viene dentro de la caja del videojuego y que tras canjearlo nos permite poder acceder a esta modalidad multijugador. A este respecto hemos de comentar la particularidad de que las copias del juego para «la prensa» no traigan ese código, lo cual obliga a tener que comprarlo si uno quiere poder analizarlo en condiciones (concretamente esta modalidad multijugador).

Atacaremos edificios para fumadores

En definitiva, Battlefield 3 ha colmado las expectativas que teníamos puestas en él antes de su lanzamiento. Si bien la apuesta de su modo campaña resulta interesante para los fans de los shooters bélicos, realmente lo que justifica su compra es su magnífico modo multijugador. Sin duda alguna, para nosotros es hoy por hoy una de las mejores alternativas para jugar online con los colegas y pasar ahí las horas dándole al vicio tan ricamente. Por ello lo recomendamos encarecidamente.

Un triste comentario

  1. Almuli dice:

    Al Arteche ese le nombrais a todas horas…cambia de frase ya..
    Pues yo soy más de puñetazos, que es así como nos defendemos en Carabanchel.. tanta pistolita y tanto tanque.. dejar de jugar a juegos de disparar y salir a dar amor a las mozas
    Aún asi un anális muy completo… pero yo ahora sólo juego a juegos de perritos.

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